Relato sobre un Matrero

cabalgando soledades
de matrero perseguido
anduvo por la meseta
entre piedras y milicos
y no vino nunca al pueblo
en veinte años sin destino

yo lo escuchaba nombrar
en la rueda bolichera
que estuvo en aquella estancia
que lo habían visto en Las Heras
pero Barreto enraizaba
mata y piedra en la meseta

al reparo de algún molle
armaba su campamento
y allí dormía sus noches
de romántico matrero
como eran largos los años
y que tristes los inviernos

abrazado a los recuerdos
desgranaba pensamientos
y en algunas ocasiones
conversaba con el viento
murmurador de mil voces
a la hora del silencio

lo ví por única vez
en la casa de Barrera
le cantaba la vejez
desde la blanca cabeza:
bajó a buscar a la muerte
que no subió a la meseta

Canción inédita compuesta
en 1971.