cuando estoy desorientado
sigo el rastro de tu mano
si estoy lejos del camino
tu mano me da una mano
y si voy a la deriva
sigo el vuelo de tus ojos
tu mirada es siempre clara
tus ojos buscan la vida
yo me quedo a tus orillas
respirando tus aromas
me alimento con tu aliento
me cobijo con tu forma
y si salgo de la nave
llevo un hilo de ternura
que comienza en mi esperanza
y termina en tu cintura